- EL MENSAJE FEMINISTA DE JESÚS
- No basta - XVI Domingo del T.O. (Lc 10, 38-42) - Ciclo C
- Comentario al Evangelio del Domingo 18 de Julio del 2010
- MARTA
- LECTIO: 16º DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO: ¿Cuál es la mejor parte escogida por María?
- XVI Domingo del T.O. (Lc 10, 38-42) - Ciclo C: ¿Qué hay ahí afuera?
- Evangelio Misionero del Dia: 17 de Julio de 2010 - XV Semana del T.O. Ciclo C
- Lecturas y Liturgia de las Horas: 17 de Julio de 2010
Posted: 16 Jul 2010 08:28 PM PDT ![]() XVI Domingo del T.O. (Lc 10, 38-42) - Ciclo C Por Fray Marcos - Publicado por Fe Adulta Si queremos entender el verdadero sentido del texto, no debemos olvidar el contexto en el evangelio de Lucas. Enmarcado dentro del viaje a Jerusalén, este relato intenta determinar el perfil de aquellos que quieren seguir a Jesús. Durante esa subida, va formando a sus discípulos. Lucas es el único que nos relata este episodio y no es casualidad que una vez más se sienta interesado en destacar la importancia de la mujer en la vida pública de Jesús. No debemos interpretar el texto como una condena de la actitud de Marta. Es solo el contrapunto para resaltar la necesidad que todo cristiano tiene de escuchar al único Maestro Las dos mujeres representan dos clases de seguidores de Jesús. Marta tiene como primer objetivo la acción, el cumplimiento de la Ley; y quiere arrastrar a los demás a su manera de entender la religión de acuerdo con el AT. Se trata de una religiosidad externa; de un toma y daca en las relaciones con Dios, que no exige el cambio interior, sino sólo la fidelidad externa a una Alianza. María simboliza a los seguidores que no provienen del judaísmo. Éstos no están condicionados por la manera de entender a Dios de las instituciones judías y reciben el mensaje de Jesús sin prejuicios. Marta recibe a Jesús en su casa. María lo recibe en su corazón y se abre totalmente a las enseñanzas de Jesús. María, que aparece en un segundo plano, es la que le dispensa la verdadera acogida; la que intenta captar las actitudes profundas de Jesús, que transforman su ser y es felicitada por ello. No tiene ningún sentido haber sacado de este relato, una distinción entre la vida contemplativa y la vida activa. Mucho menos si, en vez de distinción, lo que se pretende es una oposición. Tampoco aparece por ninguna parte la pretendida superioridad de la vida contemplativa sobre la vida activa. No es correcto el interpretar este evangelio como proclamación de dos clases de cristianos, unos que se dedican a la vida activa y otros a la contemplativa (élite privilegiada). Parece que el primero que levantó esta falsa liebre fue Orígenes, y durante 18 siglos hemos seguido corriendo detrás de un señuelo de trapo. En los primeros siglos del cristianismo se desarrolló la idea de que no se podía vivir el evangelio en medio del mundo. Surge así la idea del monacato y de la huída del mundo en el desierto. Esto no tiene nada de cristiano, porque el evangelio no invita a una separación de la vida, sino a vivirla en plenitud dentro de las situaciones normales para la mayoría. No debemos interpretar la falta de vocaciones a la vida religiosa como un desastre para la comunidad. Nuestra verdadera preocupación debía estar en que todos los que somos cristianos por el bautismo, desarrollemos de verdad esa vida cristiana, como decía hoy Pablo El domingo pasado terminaba el evangelio con esta frase: “Anda, haz tú lo mismo”. De ese pasaje se deduce que no puede darse un amor a Dios directo, que no pase por el amor a los demás. Aplicado al tema que nos ocupa, no puede haber auténtica contemplación que no se manifieste en la acción. Tampoco puede haber una acción verdaderamente espiritual que no surja de la contemplación. Claro que puede haber acciones buenas sin contemplación, pero no son más que programaciones que no nos enriquecen espiritualmente. Y puede haber contemplación sin acción, pero será siempre una falsa ilusión Una vez más surge la aparente contradicción del evangelio, cuando en otro lugar dice Jesús: “el que escucha estas palabras mías y no las pone en práctica, se parece a un hombre necio, que edificó su casa sobre arena”. Edificar sobre roca es escuchar y obrar en consecuencia. Esto que parece tan sencillo es la clave para entrar en la dinámica del mensaje de Jesús. Todo lo que no sea entrar por este camino, será engañarnos. Marta, al quejarse, no tiene en cuenta lo que María está haciendo. Sólo tiene en cuanta las consecuencias de esa actitud que le perjudica. Jesús no critica a Marta por estar ocupada, sino por estar preocupada e inquieta por realidades materiales. Tampoco dice que lo que hace sea malo. Fijaos, que dice: “María ha escogido la parte mejor; lo cual significa que lo que hacía Marta era también bueno. El mensaje es que toda acción verdaderamente cristiana debe nacer de la contemplación. Todos tenemos que ser a la vez, Marta y María. No es nada fácil mantener el equilibrio. En un árbol frutal, ¿qué es lo más importante, las raíces o el fruto? La pregunta es absurda. Sin las raíces es impensable el árbol. Sin los frutos, el árbol sería completamente inútil. Es muy fácil resbalar. En todas las épocas ha habido místicos que despreciaron el trabajo y hombres y mujeres de acción que despreciaron como inútil la contemplación. A la luz de este relato, se abre una nueva perspectiva para la mujer. María, es aceptada por Jesús como interlocutora válida de su mensaje. A pesar de su apariencia inocua, tal vez sea el relato más subversivo de todo el evangelio. “Sentada a los pies de Jesús, escuchaba su palabra”. Está haciendo referencia a la postura que adoptaban los discípulos a los pies del maestro. María está allí como discípula. Esto trastoca todos los valores en que estaba fundada la sociedad de la época. Algunos dichos rabínicos nos dan una pista de lo que pensaban de la mujer: • “El que enseña la Tora a una mujer, le enseña necedades”. • “Mejor fuera que desapareciera en las llamas la Tora, antes de ser entregada a la mujer”. • “Maldito el padre que enseña a su hija la Tora”. Para ellos la mujer era incapaz de comprender la Ley. Para Jesús, también la mujer tiene que desarrollar su interior, tiene que buscar el enriquecimiento como ser humano. Tiene que descubrir que la realización como ser humano, es más importante que todas las tareas asignadas a la mujer; más importante que la sumisión, el autosacrificio y el servicio entendido como servilismo. Jesús invita a las mujeres a emanciparse, a desarrollar sus valores espirituales. La actitud de María ayuda a Jesús a descubrir todo eso. Vio que había adquirido unos valores espirituales que a él mismo le servían de referencia. María era para él una valiosa interlocutora espiritual. Después de esto, Jesús está en condiciones de responder a la mujer que le quiso hacer una alabanza diciendo: "Dichoso el vientre que te llevó y los pechos que te criaron" (tarea femenina). "Dichosos más bien todos los que escuchan la palabra de Dios y la cumplen" (nueva tarea). No es el parir a los hijos el valor fundamental de una mujer, aunque el varón sigue empeñado en mantener esta valoración. Según el relato, la mujer no es una criada a la que no hay que pagar, no sólo está para tener hijos y cuidar del hogar. Esta actitud de Jesús para con la mujer, se manifiesta también en otros muchos lugares del evangelio. El comportamiento de Jesús con la mujer está completamente libre de misoginia o antifeminismo. Ni asomo de miedo al sexo o machismo, ni siquiera paternalismo. Los evangelios nos dicen que en el grupo de seguidores había también mujeres. Los relatos de la mujer adúltera, la pecadora, la Magdalena, la Cananea, la Hemorroisa, nos indican esa preocupación constante por la mujer, que en su tiempo estaba completamente marginada. Lástima que esa actitud de Jesús haya quedado relegada al olvido en la Iglesia que sigue manteniendo después de dos mil años, su ideología machista. El Concilio Vaticano II rechazó toda forma de discriminación por razón de sexo como contraria al plan de Dios; pero a renglón seguido nos demuestra, en la práctica, que eso no tiene vigencia en la institución. Las mujeres que se sintieron comprendidas y liberadas por Jesús, son discriminadas por sus sucesores. La opresión de las mujeres en la Iglesia es sólo una manifestación externa de la represión de lo femenino en la jerarquía. Es hora de superar un patriarcado ciego, inconsciente y fanático. Si la mujer hubiera tenido algo que ver en las decisiones de la Iglesia, no habría cometido tantas barbaridades. No es que el cristianismo haya incrementado la marginación de la mujer, pero sí ha mantenido actitudes ancestrales que habían sido superadas por Jesús. Lo que los cristianos hemos hecho con la mujer no es sólo mantener una mala costumbre; con el evangelio en la mano podemos afirmar que es una injusticia en toda regla. Contra esa injusticia no sólo tienen que luchar las mujeres, tenemos que luchar todos; y no por hacer un favor a la mujer, sino porque es un despilfarro de energías, prescindir de un plumazo de más de la mitad de sus miembros a la hora de buscar soluciones a sus problemas. Y no se trata sólo del problema de la ordenación sacerdotal. Desde luego no hay ninguna razón teológica ni exegética en contra, que tenga un mínimo de consistencia. Pero ese problema quedaría resuelto en el momento en que la mujer quedara equiparada al varón en todos los ámbitos de la estructura eclesial. Hay que reconocer con toda sinceridad, que se trata de una lucha por el poder. ¿Por qué tiene que ser el varón el que toma decisiones, incluso en temas que afectan exclusivamente a la mujer? Meditación-contemplación “¡Andas preocupada e inquieta por tantas cosas!” Hoy se propone un análisis personal de nuestra vida. Nadie puede dar por supuesto el difícil equilibrio. Como el volante de un automóvil, siempre tendremos que estar rectificando. .............................. No hay parte mejor o peor. Como en el frutal, raíz y fruto son igualmente importantes. En el tiempo, echar raíces (escuchar a Jesús) es lo primero. El objetivo será siempre el fruto (el servicio a todos) ........................ Intenta ser cada día más Marta y más María. Es la única manera de madurar en la vida cristiana. Cada día más enraizado en Cristo y más volcado hacia los demás. ............ Blog católico de oraciones y reflexiones pastorales sobre la liturgia dominical. Para compartir y difundir el material brindado. Crremos que Dios regala Amor y Liberación gratuita e incondicionalmente. |
Posted: 16 Jul 2010 04:56 PM PDT ![]() Hay cansancios típicos en la sociedad actual que no se curan con las vacaciones. No desaparecen por el mero hecho de irnos a descansar unos días. La razón es sencilla. Las vacaciones pueden ayudar a rehacernos un poco, pero no pueden darnos el descanso interior, la paz del corazón y la tranquilidad de espíritu que necesitamos. Hay un primer cansancio que proviene de un activismo agotador. No respetamos los ritmos naturales de la vida. Hacemos cada vez más cosas en menos tiempo. De un día queremos sacar dos. Vivimos acelerados, en desgaste permanente, deshaciéndonos cada día un poco más. Ya llegarán las vacaciones para «cargar pilas». Es un error. Las vacaciones no sirven para resolver este cansancio. No basta «desconectar» de todo. A la vuelta de vacaciones todo seguirá igual. Lo que necesitamos es no acelerar más nuestra vida, imponernos un ritmo más humano, dejar de hacer algunas cosas, vivir más despacio y de manera más descansada. Hay otro tipo de cansancio que nace de la saturación. Vivimos un exceso de actividades, relaciones, citas, encuentros, comidas. Por otra parte, el contestador automático, el móvil, el ordenador, el correo electrónico facilitan nuestro trabajo, pero introducen en nuestra vida una saturación. Estamos en todas partes, siempre localizables, siempre «conectados». Ya llegarán las vacaciones para «desaparecer», y «perdernos». Es un error. Lo que necesitamos es aprender a «ordenar» nuestra vida: elegir lo importante, relativizar lo accidental, dedicar más tiempo a lo que nos da paz interior y sosiego. Hay también un cansancio difuso, difícil de precisar. Vivimos cansados de nosotros mismos, hartos de nuestra mediocridad, sin encontrar lo que desde el fondo anhela nuestro corazón. ¿Cómo nos van a curar unas vacaciones? No es superfluo escuchar las palabras de Jesús a Marta: «Andas inquieta y nerviosa con tantas cosas, pero sólo una es necesaria». Su hermana María la ha encontrado sentada a los pies de Jesús. Blog católico de oraciones y reflexiones pastorales sobre la liturgia dominical. Para compartir y difundir el material brindado. Crremos que Dios regala Amor y Liberación gratuita e incondicionalmente. |
Posted: 16 Jul 2010 04:46 PM PDT Por Fernando Torres Pérez cmf Publicado por Ciudad Redonda Acoger, recibir, amar... Ahora que el turismo se ha puesto de moda, una de las virtudes atribuidas a los pueblos de cada nación o región o ciudad que se quiere promocionar como lugar de destino turístico es la hospitalidad. Decir de los habitantes de un lugar que son hospitalarios es una forma de invitar al turista. Es decirle que se va a sentir como en casa, que le van a tratar bien, que no se va a sentir extranjero ni marginado. No deja de ser una mentira y de las gordas dado que toda la hospitalidad que se recibe en esos destinos turísticos hay que pagarla puntualmente y casi siempre a altos precios. Ni la hospitalidad es realmente virtud ni la realidad es como la pintan las fotos de esos folletos.La hospitalidad es virtud antigua, típica del mundo rural. Típica, sobre todo, de un mundo más duro y difícil, donde sólo esa básica solidaridad humana podía ofrecer la ayuda necesaria para sobrevivir. En un mundo donde no había servicios de emergencia, ni ambulancias, ni seguros sociales, ni estado del bienestar, la única red disponible para que la persona en problemas no cayese en el vacío era la mano amiga de otra persona que prometía compartir lo que se tenía, hacer un hueco en la mesa y en la casa, un poco de comida y un lugar para dormir, descansar y reponer fuerzas. Abrir la mano al hermano El mensaje de Jesús no está muy lejos del sentido común. La salvación no la vamos a encontrar “cerrándonos a nuestra propia carne” sino tendiendo la mano al hermano. Y “nuestra propia carne” es todo hombre y mujer de este mundo. Este mundo ya no está dividido sino globalizado. No hay muchos mundos sino uno sólo. Todos los que vivimos en él formamos parte de la misma familia. Sólo sobreviviremos si lo hacemos juntos, dándonos la mano y caminando juntos. Cerrarnos a nuestra propia carne, darnos la espalda unos a otros, no nos lleva más que a la muerte y a la destrucción. ¿No era algo así la carrera de armamentos? La primera lectura nos habla de un mundo pasado, rural, lejos de las prisas de las ciudades. Es un mundo en el que las personas no viven encerradas en sus casas, siempre rodeadas de medidas de seguridad porque tienen miedo de los “otros” y de lo que los otros puedan hacerles. Abrahán está sentado a la puerta de su tienda. La puerta está abierta y los que vienen por el camino pueden pasar y sentirse como en casa. Sin pagar. Sin condiciones de ningún tipo. Los visitantes son como la visita de Dios mismo Por eso Abrahán se postra en tierra ante ellos y les pide que pasen a su tienda. La hospitalidad se convierte casi en un favor que hace el visitante al anfitrión. Hospitalarios por el Reino La hospitalidad es acoger al otro y abrirle las puertas de la casa y también del corazón. No es sólo atender materialmente. Nuestra sociedad ha organizado unos servicios sociales muy buenos materialmente pero a veces faltos de corazón y de alma. De mis tiempos de peregrino en el Camino de Santiago recuerdo que los refugios que estaban dirigidos por las instituciones públicas solían estar muy bien en cuanto a las condiciones materiales pero nada más. Sin embargo, los organizados por asociaciones de amigos del Camino eran mucho más pobres en lo material pero llenos de vida, de aire de familia, de acogida fraternal. Quizá esa sea la reprimenda cariñosa que le hace Jesús a Marta. Tanto preocuparse por lo material y se olvidaba de que en la casa había entrado una persona, que las personas necesitamos comer y vestirnos y muchas otras cosas, pero sobre todo necesitamos alguien que nos escuche, que nos atienda y entienda, que nos acoja como somos, sin condiciones. Todo eso es la hospitalidad. Una antigua virtud. Una virtud profundamente evangélica porque tiene mucho que ver con el Reino de Dios. Una virtud muy necesaria en nuestro mundo porque la sociedad se hace cada vez más individualista. Hay mucha soledad. Hay mucha necesidad de personas que acojan, que tiendan la mano a los hermanos y hermanas. Así se construye el Reino. Y los discípulos de Jesús deberíamos ser los primeros en acoger, en recibir, en amar. ¿No es eso completar en nuestra carne los dolores de Cristo? ¿No es eso ser ministro del Evangelio? ¿No es eso anunciar la esperanza de la gloria que es Cristo? Blog católico de oraciones y reflexiones pastorales sobre la liturgia dominical. Para compartir y difundir el material brindado. Crremos que Dios regala Amor y Liberación gratuita e incondicionalmente. |
Posted: 16 Jul 2010 04:24 PM PDT ![]() XVI Domingo del T.O. (Lc 10, 38-42) - Ciclo C Por José María Maruri, SJ 1.- Dicho sea con perdón, pero este evangelio no me gusta, como a muchas Martas que estáis aquí: madres de familia, amas de casa, que no tenéis tiempo para tomaros unos días de retiro que os vendrían a las mil maravillas. Yo participo mucho de vuestra vida y creo que os comprendo porque siempre me ha tocado ser “la gobernanta” de nuestras residencias jesuíticas. Yo creo que para entender este evangelio hay que mirarlo desde dos puntos de vista. Uno es el de la primera lectura en que se alaba y premia la hospitalidad de Abrahán, que conlleva hacer el pan, sacar el agua, matar el cordero y asarlo. La Escritura alaba a Abrahán haciendo de Marta. Bueno, en realidad los que hicieron de Marta fue Sara que hizo el pan y el sirviente que mató y asó el cordero. Abrahán da la impresión de dar órdenes y escurrir el hombro. Si Dios bendice la hospitalidad de Abrahán, Jesús no puede por menos que alabar la hospitalidad de Marta. Y el otro punto de vista es la familiaridad especial que existió entre Marta y Jesús, especial aun comparada con el cariño y amistad con María y Lázaro. Es notable que en los evangelios, fuera de los discípulos, sólo se dice que Jesús amaba a estos tres hermanos, pero los cita en este orden. Dice: “amaba Jesús a Marta, a su hermana María y a Lázaro”. El primer objeto del cariño del Señor es Marta. Y si leéis con detenimiento la narración de la resurrección de Lázaro os daréis cuenta de que la primera que sale corriendo al encuentro de Jesús, que llega, es Marta. Y Marta es la primera es la primera en decirle, como dirá María: “Si hubieses estado aquí no hubiera muerto mi hermano”. Y con una fe que no muestra María añade: “pero aun ahora sé que todo lo que le pidas a Dios te concederá”, que es decirle ya sé que para ti no es tarde. Marta muestra aquí una profundidad de conocimiento y cariño semejante al de la Virgen Madre, que en Caná no pide sino que propone: “no tienen vino”: Y es Marta, no María, la que oye la maravillosa promesa de Jesús, que todo en el crea en Él, como ella, tiene vida eterna. 2.- Marta se sabía muy querida por Jesús y por eso se atreve a decirle: “pero no te has dado cuenta que María me ha dejado sola con el servicio. Es que no te importa. ¿Dila que me ayude? La respuesta de Jesús suena a repulsa: “Marta está agitada con muchas cosas, una sola es necesaria”. Pero a quien no le suenan a repulsa las palabras de Jesús es a la Madre, en Caná. “Que nos va a ti y a mi que no tengan vino. Aun no ha llegado mi hora…” Y hubo vino hasta emborracharse. Las palabras de Jesús a mi me suenan a “mira, Marta, tú sabes lo que os quiero a los tres (y especialmente a ti) y vengo a estar un rato con vosotros, y charlar y oíros charlar porque todo eso me descansa. Ven aquí, siéntate, y cuéntame de tu vida y luego, chica, con un par de huevos fritos tenemos bastante. 3.- Una cosa sí nos quiso avisar el Señor, y es que si es verdad que el trabajo es el amor hecho visible, pero cuando nos absorbe demasiado es cuando se convierte en droga. Workcohilics dicen los norteamericanos… adictos al trabajo. Que el trabajo nunca produce estrés ni “depre” cuando nuestro corazón está allá en lo hondo sentado, sentado a los pies del Señor, cortando aristas de la ansiedad. Ese aviso le vino bien a Marta, y nos viene bien a nosotros. Pero estoy seguro que después de su contestación, Jesús se dirigió a María y la dijo que ayudase a su hermana, acordándose de su Madre bendita que en su vida tuvo pocos momentos para estar sentada, porque tenía que cuidar de Él día y noche. Blog católico de oraciones y reflexiones pastorales sobre la liturgia dominical. Para compartir y difundir el material brindado. Crremos que Dios regala Amor y Liberación gratuita e incondicionalmente. |
Posted: 16 Jul 2010 04:14 PM PDT 1. Oración inicial Señor Jesús, envía tu Espíritu, para que Él nos ayude a leer la Biblia en el mismo modo con el cual Tú la has leído a los discípulos en el camino de Emaús. Con la luz de la Palabra, escrita en la Biblia, Tú les ayudaste a descubrir la presencia de Dios en los acontecimientos dolorosos de tu condena y muerte. Así, la cruz, que parecía ser el final de toda esperanza, apareció para ellos como fuente de vida y resurrección.Crea en nosotros el silencio para escuchar tu voz en la Creación y en la Escritura, en los acontecimientos y en las personas, sobre todo en los pobres y en los que sufren. Tu palabra nos oriente a fin de que también nosotros, como los discípulos de Emaús, podamos experimentar la fuerza de tu resurrección y testimoniar a los otros que Tú estás vivo en medio de nosotros como fuente de fraternidad, de justicia y de paz. Te lo pedimos a Ti, Jesús, Hijo de María, que nos has revelado al Padre y enviado tu Espíritu. Amén. 2. Lectura a) Clave de lectura: El texto del Evangelio de este domingo narra la visita de Jesús a la casa de Marta y María. Jesús dice a Marta: “María ha escogido la mejor parte que no le será quitada”. A lo largo de los siglos, estas palabras, muchas veces, han sido interpretadas como si fuese una confirmación por parte de Jesús del hecho que la vida contemplativa escondida en los monasterios es mejor y más sublime que la vida activa de aquellos que trabajan en el campo de la evangelización. Esta interpretación no es muy correcta, porque no tiene fundamento en el texto. Para entender el significado de estas palabras de Jesús ( y de cualquier otra palabra), es importante tomar en consideración el contexto, sea el contexto del evangelio de Lucas, como también el contexto más amplio de la obra de Lucas que comprende el Evangelio y las Actas de los Apóstoles. Antes de verificar el contexto más amplio de las Actas de los Apóstoles, tratemos de echar una mirada al texto en sí y ver como está colocado en el contexto inmediato del evangelio de Lucas. Durante la lectura, trata de sentirte presente en la casa de Marta y de sentirte vecino al ambiente y a las palabras de Jesús no sólo al oído de Marta, sino al oído de las comunidades para las cuales Lucas escribía su evangelio y a nuestro oído, el de nosotros, que hoy escuchamos estas palabras tan inspiradoras de Jesús. b) Una división del texto para ayudarnos en la lectura Lucas 10,38: Marta recibe a Jesús en su casa Lucas 10,39-40a: María escucha la palabra de Jesús. Marta se dedica al servicio de la casa Lucas 10-40b: Marta reclama y pide a Jesús que intervenga Lucas 10,41-42: Respuesta de Jesús c) Texto: 38 Yendo ellos de camino, entró en un pueblo; y una mujer, llamada Marta, le recibió en su casa. 39 Tenía ella una hermana llamada María, que, sentada a los pies del Señor, escuchaba su palabra, 40 mientras Marta estaba atareada en muchos quehaceres. Al fin, se paró y dijo: «Señor, ¿no te importa que mi hermana me deje sola en el trabajo? Dile, pues, que me ayude.» 41 Le respondió el Señor: «Marta, Marta, te preocupas y te agitas por muchas cosas; 42 y hay necesidad de pocas, o mejor, de una sola. María ha elegido la mejor parte, que no le será quitada.» 3. Un momento de silencio orante para que la Palabra de Dios pueda entrar en nosotros e iluminar nuestra vida. 4. Algunas preguntas para ayudarnos en la meditación y en la oración. a) ¿Cuál es el punto que más te ha gustado o ha llamado más tu atención? ¿Por qué? b) ¿Qué querrá decir Jesús con esta afirmación: “una sóla cosa es necesaria”? c) ¿Cuál era la “mejor parte” que María escogió y que no le será quitada? d) Un suceso histórico puede tener un sentido simbólico profundo. ¿Has conseguido tú descubrir un sentido simbólico en el modo en el que Lucas describe la visita de Jesús a la casa de Marta y María? e) Lee atentamente las Actas de los Apóstoles y trata de descubrirle el nexo que hay entre el problema de los apóstoles y la conversación de Jesús con María. 5. Para los que quisieren profundizar más en el tema a) Contexto del Evangelio de Lucas: En Lucas 9,51 comienza la segunda etapa de la actividad apostólica de Jesús, el largo viaje desde Galilea hasta Jerusalén. Al comienzo del viaje, Jesús sale del mundo judío y entra en el mundo de los samaritanos (Lc 9,52). A pesar de ser mal recibido por los samaritanos (Lc 9,53), continúa en su territorio y hasta corrige a los discípulos que piensan de modo diverso (Lc 9,54-55). Cuando responde a aquellos que querían seguirlo, Jesús les aclara el significado de cuanto acontece y les señala las exigencias de la misión (Lc 9,56-62). Después Jesús designa otros setenta y dos discípulos para ir en misión delante de Él. El envío de los doce (Lc 9,1-6) era para el mundo de los judíos. El envío de los setenta y dos es para el mundo no judío (Lc 10,1-16). Terminada la misión, Jesús y los discípulos se reúnen para evaluar el trabajo desarrollado por ellos, pero Jesús insiste en la certeza mayor de que sus nombres están escritos en el cielo (Lc 10.17-37). Después viene nuestro texto que describe la visita de Jesús a la casa de Marta y María (Lc 10,38-42). Lucas no especifica dónde se encuentra la aldea de María y Marta, pero en el contexto geográfico de su evangelio, el lector imagina que la aldea se encontraba en Samaría. Por el evangelio de Juan sabemos que Marta y María vivían en Betania, una pequeña aldea vecina a Jerusalén (Jn 11,1). Juan nos dice además que tenía un hermano de nombre Lázaro. b) Comentario del texto Lucas 10,38: Marta recibe a Jesús en su casa “Yendo ellos de camino, entró en un pueblo y una mujer de nombre Marta, lo acogió en su casa”. Jesús iba de camino. Lucas no siempre dice por dónde está pasando Jesús, pero muchas veces dice que Jesús iba de camino (Lc 9,51.53.57; 10,1.38; 11,1; 13,22.33; 14,25; 17,11: 18,31.35; 19,1.11.28.29.41.45; 20,1). Porque Jesús estaba firmemente decidido a subir a Jerusalén (Lc 19,51). Esta decisión le orienta durante todas las etapas del viaje. La entrada en el pueblo y en la casa de Marta y María es una etapa más de esta larga caminata hasta Jerusalén y forma parte de la realización de la misión de Jesús. Desde el comienzo, el objetivo de la caminata está definido; realizar su misión de Siervo, anunciada por Isaías (Is 53,2-10; 61,1-2) y asumida por Jesús en Nazaret (Lc 4,16-21). Lucas 10,39-40a: María escucha la palabra, Marta se dedica al servicio “Tenía ella una hermana llamada María, que, sentada a los pies de Jesús, escuchaba su palabra; mientras Marta estaba atareada en muchos quehaceres”. Una cena normal en casa, en familia. Mientras algunos hablan, otros preparan la comida. La dos cosas son importantes y necesarias, las dos se complementan, sobre todo cuando se trata de acoger a alguno que viene de fuera. Afirmando que “Marta estaba atareada en muchos quehaceres” (diaconía), Lucas evoca a los setenta y dos discípulos también ocupados en muchas cosas del servicio misionero (Lc 10,17-18) Lucas 10,40b: Marta reclama y pide a Jesús que intervenga “Al fin se paró y dijo: «Señor, ¿no te importa que mi hermana me deje sola en el trabajo? Dile, pues, que me ayude». Otra escena familiar, pero no tan normal. Marta se está preocupando sola de la preparación de la comida, mientras María está sentada, y está conversando con Jesús. Marta reclama. Quizá Jesús interfiera y diga algo a la hermana para ver si le ayuda en el servicio en la diaconía. Marta se considera una sierva y piensa que el servicio de una sierva es el de preparar la comida y que su servicio en la cocina es más importante que el de su hermana que habla con Jesús. Para Marta, lo que hace María no es servicio, porque dice: “¿No te importa que mi hermana me deje sola en el servicio? Pero Marta no es la única sierva. También Jesús asume el papel de siervo, a saber, el Siervo anunciado por el profeta Isaías. Isaías había dicho que el servicio principal del Siervo es el de estar delante de Dios a la escucha en oración para poder descubrir una palabra de consuelo que llevar a aquellos que están cansados. Decía el Siervo: “ El Señor Dios me ha dado una lengua de discípulo, para que yo sepa dirigir al cansado una palabra. Cada mañana despierta mis oídos para que yo oiga como discípulo.” (Is 50,4). Ahora, María tiene un comportamiento de oración delante de Jesús. Y surge la pregunta: ¿quién realiza mejor el servicio de sierva: Marta o María? Lucas 10,41-42: Respuesta de Jesús “Le respondió el Señor: «Marta, Marta te preocupas y te agitas por muchas cosas y hay necesidad de pocas, o mejor, de una sola. María ha elegido la mejor parte, que no le será quitada»”. Una bella respuesta y muy humana. Para Jesús una buena conversación con personas amigas es importante e incluso más importante que el comer (cf. Jn 4,32). Jesús no está de acuerdo con la preocupación de Marta. Él no quiere que la preparación del almuerzo interrumpa la conversación. Y es como si dijese: “Marta, no hay necesidad de preparar tantas cosas. Basta una pequeña cosa. Y luego ven a participar de la conversación, tan bella”. Este es el significado principal tan sencillo y humano de las palabras de Jesús. A Jesús le agrada una buena conversación. Y una buena conversación con Jesús produce una conversión. Pero en el contexto del evangelio de Lucas, estas palabras decisivas de Jesús toman un significado simbólico más profundo: i) Como Marta, también los discípulos, durante la misión, se preocupaban de muchas cosas, pero Jesús aclara bien que la cosa más importante es la de tener los nombres escritos en el cielo, o sea, ser conocidos y amados por Dios (Lc 10,20). Jesús repite a Marta: “Tú te preocupas y agitas por muchas cosas y hay necesidad de pocas, mejor, de una sola”. ii) Antes de este episodio, un doctor de la ley había reducido los mandamientos a uno solo: Amarás al Señor sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo” (Lc 10,27). Cumpliendo este único y mejor mandamiento, la persona estará dispuesta a obrar con amor como el Buen Samaritano y no como el sacerdote y el levita que no cumplieron con su deber (Lc 10,25-42). Los muchos servicios de Marta deben ser realizados a partir de este único servicio verdaderamente necesario que es la atención amorosa a las personas. Esta es la mejor parte que María ha escogido y que no le será quitada. iii) Marta se preocupa de servir (diaconía). Ella quería ser ayudada por María en el servicio de la mesa. ¿Pero cuál es el servicio que Dios desea? Esta es la cuestión. El comportamiento de María está más de acuerdo con el comportamiento del Siervo de Dios, porque, como el Siervo, ella se encuentra en una situación de oración delante de Jesús. María no puede abandonar esta postura de oración en presencia de Dios. Porque si lo hiciese, no descubriría la palabra de consuelo que llevar a los cansados y desanimados. Este es el verdadero servicio que Dios está pidiendo a todos. c) Ampliando conocimientos: El contexto más amplio de las Actas de los Apóstoles. Después de la muerte y resurrección de Jesús nacerán las comunidades. Ellas debían afrontar problemas nuevos, para los cuales no existían soluciones previstas de antemano. Para orientarse en la solución de los problemas, las comunidades intentaban recordar las palabras y gestos de Jesús, que pudiesen ayudar a traer un poco de luz. Así, el episodio de la visita de Jesús a la casa de Marta y María fue recordado y narrado para ayudar a esclarecer el problema descrito en las Actas 6,1-6. El rápido crecimiento del número de cristianos creó divisiones en la comunidad. Los fieles de origen griego comenzaron a quejarse de los de origen hebreo y decían que sus viudas estaban desatendidas en la vida de cada día. Era una discriminación en la vida de la comunidad y falta de personas para los diversos servicios. Hasta entonces no había surgido todavía la necesidad de comprometer a otras personas en la coordinación de la comunidad y en el cumplimiento de los servicios. Como Moisés, obligado por los hechos, dividió el poder y convocó a otros setenta jefes para los servicios necesarios entre el pueblo de Dios (Ex 18,17-23; Núm. 11,16-17). Jesús había hecho la misma cosa: convocó otros setenta discípulos (Lc 10, 1). Ahora, ante nuevos problemas, los apóstoles hicieron lo mismo. Convocaron a la comunidad y propusieron el problema delante de todos. Sin duda, la palabra de Jesús a Marta y María les ayudó en la solución. A continuación se puede leer los dos textos, uno junto al otro. Intenta descubrir cómo se iluminan mutuamente: 1 Por aquellos días, al multiplicarse los discípulos, hubo quejas de los helenistas contra los hebreos, porque sus viudas eran desatendidas en la asistencia cotidiana. 2 Los Doce convocaron la asamblea de los discípulos y dijeron: «No está bien que nosotros abandonemos la palabra de Dios por servir a las mesas. 3Por tanto, hermanos, buscad de entre vosotros a siete hombres, de buena fama, llenos de Espíritu y de saber, y los pondremos al frente de esa tarea; 4 mientras que nosotros nos dedicaremos a la oración y al ministerio de la palabra.» (Hechos 6, 1-4) 38 Yendo ellos de camino, entró en un pueblo; y una mujer, llamada Marta, le recibió en su casa. 39 Tenía ella una hermana llamada María, que, sentada a los pies del Señor, escuchaba su palabra, 40 mientras Marta estaba atareada en muchos quehaceres. Al fin, se paró y dijo: «Señor, ¿no te importa que mi hermana me deje sola en el trabajo? Dile, pues, que me ayude.» 41 Le respondió el Señor: «Marta, Marta, te preocupas y te agitas por muchas cosas; 42 y hay necesidad de pocas, o mejor, de una sola. María ha elegido la mejor parte, que no le será quitada.» Los apóstoles se encontraban entre dos necesidades reales, las dos muy importantes, definidas como servicio (diaconía): el servicio de la Palabra y el servicio de las mesas. ¿Qué hacer? ¿Cuál de las dos es la más importante? La respuesta de Jesús a María ayudó a resolver el problema. Jesús dice que María no podía abandonar la conversación con Él para a ayudar en la cocina. Así, Pedro concluye:“¡No es justo que nosotros dejemos la Palabra de Dios por el servicio de las mesas!” Y Pedro define el servicio del apóstol como “ el dedicarse a la oración y al ministerio de la Palabra”. No se dice que un servicio sea mejor que otro. Lo que no puede suceder es que el servicio de la Palabra quede perjudicado por las exigencias imprevistas del servicio de las mesas. La comunidad tenía la obligación de afrontar el problema, preocupándose de tener gente suficiente en todos los servicios, para poder conservar, así, el servicio de la Palabra en su integridad. El servicio de la Palabra propio de los apóstoles (y de María a los pies de Jesús) tenía dos dimensiones: por un lado la escucha de la Palabra, recibirla, encarnarla, anunciarla, divulgarla mediante el trabajo activo de la evangelización y, por otro, en nombre de la comunidad, responder a Dios en la oración, representar a la comunidad en su dimensión orante ante Dios. No se trata de una oposición entre los dos servicios: palabra y mesa. Los dos son necesarios e importantes para la vida de la comunidad. Para los dos es necesario tener gente disponible. En la economía del Reino, además, el servicio de la Palabra (evangelización) es la raíz, la fuente. Es la parte mejor que María ha escogido. El servicio de la mesa es el resultado, el fruto, es su revelación. Para Lucas y para los primeros cristianos, la “parte mejor” de la que habla Jesús a Marta, es el servicio de la evangelización, fuente de todo el resto. El Maestro Eckart, el gran místico dominico del Medio Evo, interpreta de un modo simpático este episodio. Dice que Marta sabía ya cómo trabajar y vivir en presencia de Dios, María no sabía y estaba aprendiendo. Por esto no podía ser interrumpida. Los grandes místicos son la prueba de que este texto no se puede interpretar como una confirmación por parte de Jesús de que la vida contemplativa es mejor y más sublime que la activa. No está bien hacer una distinción de estas dos palabras, porque la una se completa, se fundamenta , se aclara en la otra. Nuestro San Juan de la Cruz carmelita, en algo más de diez años recorrió 27.000 kilómetros caminando por toda la España. Santa Teresa de Jesús no se quedaba nunca parada, ocupada como estaba en la fundación de tantos monasterios. Jesús mismo vivía la profunda unidad de la vida contemplativa y activa. 6. Oración de un Salmo Salmo 145 (146): Dios merece alabanza Te ensalzaré, Dios mío, mi Rey, bendeciré tu nombre por siempre; todos los días te bendeciré, alabaré tu nombre por siempre. Grande es Yahvé, muy digno de alabanza, su grandeza carece de límites. Una edad a otra encomiará tus obras, pregonará tus hechos portentosos. El esplendor, la gloria de tu majestad, el relato de tus maravillas recitaré. Del poder de tus portentos se hablará, y yo tus grandezas contaré; se recordará tu inmensa bondad, se aclamará tu justicia. Es Yahvé clemente y compasivo, tardo a la cólera y grande en amor; bueno es Yahvé para con todos, tierno con todas sus creaturas. Alábente, Yahvé, tus creaturas, bendígante tus fieles; cuenten la gloria de tu reinado, narren tus proezas, explicando tus proezas a los hombres, el esplendor y la gloria de tu reinado. Tu reinado es un reinado por los siglos, tu gobierno, de edad en edad. Fiel es Yahvé en todo lo que dice, amoroso en todo lo que hace. Yahvé sostiene a los que caen, endereza a todos los encorvados. Los ojos de todos te miran esperando; tú les das a su tiempo el alimento. Tú abres la mano y sacias de bienes a todo viviente. Yahvé es justo cuando actúa, amoroso en todas sus obras. Cerca está Yahvé de los que lo invocan, de todos los que lo invocan con sinceridad. Cumple los deseos de sus leales, escucha su clamor y los libera. Yahvé guarda a cuantos le aman, y extermina a todos los malvados. ¡Que mi boca alabe a Yahvé, que bendigan los vivientes su nombre sacrosanto para siempre jamás! 7. Oración final Señor Jesús, te damos gracia por tu Palabra que nos ha hecho ver mejor la voluntad del Padre. Haz que tu Espíritu ilumine nuestras acciones y nos comunique la fuerza para seguir lo que Tu Palabra nos ha hecho ver. Haz que nosotros como María, tu Madre, podamos no sólo escuchar, sino también poner en práctica la Palabra. Tú que vives y reinas con el Padre en la unidad del Espíritu Santo por todos los siglos de los siglos. Amén. Blog católico de oraciones y reflexiones pastorales sobre la liturgia dominical. Para compartir y difundir el material brindado. Crremos que Dios regala Amor y Liberación gratuita e incondicionalmente. |
Posted: 16 Jul 2010 04:07 PM PDT ![]() Por P. Félix Jiménez Tutor, escolapio Hay un anuncio sobre las Páginas Amarillas que dice: "lo que está ahí afuera, está también aquí dentro". No sé si esto puede aplicarse también a lo que aquí hacemos. Sí tenemos que intentar reconciliar el "ahí afuera" y el "aquí dentro". ¿Qué hay ahí afuera? ¿De qué está hecha y llena nuestra vida de cada día? En nuestro mundo y en nuestra vida hay sufrimiento, mal, avaricia, soledad, muerte…batallas que ganar a pesar de nuestra debilidad, parientes que visitar, barrios peligrosos, amenazas que ignorar…una letanía larga de peligros y alegrías. Nadie tiene que recordarnos lo que tenemos que hacer ahí afuera porque nuestra vida está en juego. Sabemos que tenemos que salir a ganarnos el pan de cada día. Somos como Marta, ocupados con todos los detalles cotidianos del trabajo y la hospitalidad y esperando que alguien nos eche una mano. Como Marta, preocupados por mil cosas. Y no somos tan tontos como para esperar que la divina Providencia nos traiga el pan a casa. Nuestras vidas las pasamos luchando por sobrevivir. Estamos muy lejos de creernos las palabras imposibles y utópicas de Jesús: "Sólo una cosa es necesaria". No hace falta decir que cuando venimos a la iglesia, nuestro aquí dentro, no estamos totalmente desligados del ahí afuera. Nuestra dimensión humana nos acompaña siempre. Estamos aquí no sólo para dar sentido a la vida real sino simplemente porque sí. Estamos aquí para descansar, encontrar paz, acompañar a Jesús, el dador de la vida humana y la eterna. ¿Dónde podemos aprender que una sola cosa es necesaria? ¿Cómo podemos robustecer nuestra fe sin contemplación y sin oración? ¿Acaso no necesitamos recordar nuestra dimensión espiritual? ¿No nos quejamos de que el ritmo de la vida es muy rápido y siempre nos quedan cosas por hacer? "Sólo una cosa es necesaria". Vivir plenamente una relación personal con Jesucristo que nos envía ahí afuera a amar y transformar nuestro mundo. ¿Es esto suficiente? Muchos católicos, ahí afuera, desprecian a María y no valoran este tiempo, ya largo o corto, gastado libremente en oración. La oración, dicen, es como el aire que respiramos. Sin oración no se puede vivir la vida cristiana con madurez y responsabilidad. Contemplación y lucha, las dos caras de la misma moneda. Jesús oró y luchó. Dicen que no son los suburbios con sus drogas y pandillas los que nos amenazan sino el suburbio que cada uno lleva dentro. La iglesia no es una estación de servicio donde llego y pido que me llenen el tanque del coche. La iglesia es un lugar en el que no pasa nada y todo puede pasar si como Abraham le pido a Dios que no pase de largo. Blog católico de oraciones y reflexiones pastorales sobre la liturgia dominical. Para compartir y difundir el material brindado. Crremos que Dios regala Amor y Liberación gratuita e incondicionalmente. |
Posted: 16 Jul 2010 03:57 PM PDT ![]() Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo 12, 14-21 Los fariseos se confabularon para buscar la forma de acabar con Jesús. Al enterarse de esto, Jesús se alejó de allí. Grandes multitudes lo siguieron, y los sanó a todos. Pero Él les ordenó severamente que no lo dieran a conocer, para que se cumpliera lo anunciado por el profeta Isaías: "Éste es mi servidor, a quien elegí, mi muy querido, en quien tengo puesta mi predilección. Derramaré mi Espíritu sobre Él y anunciará la justicia a las naciones. No discutirá ni gritará, y nadie oirá su voz en las plazas. No quebrará la caña doblada y no apagará la mecha humeante, hasta que haga triunfar la justicia; y las naciones, pondrán la esperanza en su Nombre". Compartiendo la Palabra Por CELAM - CEBIPAL “Mirad a mi Siervo, mi predilecto” La postura de Jesús frente a precepto del sábado le acarrea persecución: “los fariseos… se confabularon contra él para ver cómo eliminarle” (12,14). Pero la persecución no calla la voz del profeta. Jesús aplica lo mismo que ya había enseñado en el manual de la misión (“cuando os persigan en una ciudad huid a otra”, 10,23), de ahí que “se retiró de allí” (12,15ª). Jesús no ofrece resistencia a la hostilidad de los fariseos, en coherencia con el anuncio de las bienaventuranzas (ver 5,4.9.39), ni le devuelve mal al mal sino que sigue adelante con su misión (ver 10,26-27) con firmeza –así su misma vida esté en juego-. Entonces las consecuencias se ven: “le siguieron muchos y los curó a todos” (12,15b). Los vv.16-21 nos colocan frente al primer gran cántico del “Siervo Sufriente de Yahveh” proclamado por Isaías 42,1-4; se escucha la voz del cántico en el cual el “Siervo” toma conciencia de su vocación. Sobre este trasfondo bíblico el evangelista Mateo interpreta el sentido de la misión de Jesús, el porqué y para qué de ella, así como el estilo particular caracterizado por la misericordia. Meditando este pasaje al tiempo que se colocan al frente las eventualidades del ministerio de Jesús, los discípulos van comprendiendo a fondo la verdadera identidad de Jesús y lo que va implicar para ellos el seguimiento. El Jesús que conocemos como “Señor del Sábado” y “Mayor que el Templo” es también un “Siervo” humilde de los propósitos salvíficos de Dios por el camino del sufrimiento. Su misterio irá saliendo a la luz en la medida en que avance el relato evangélico. Por eso el aprendizaje de la identidad de Jesús será lento y prudente. Si Jesús “les mandó enérgicamente que no le descubrieran” es porque no bastan los milagros para sacar conclusiones inmediatas sobre quién es el Maestro, se necesita la escucha de la palabra de Dios a la cuál Él le está dando cumplimiento (“Para que se cumpliera el oráculo del profeta”, 12,17; ver 5,17). A lo largo del evangelio, Mateo cita repetidas veces los cánticos del “Siervo Sufriente”: en el bautismo (3,17; ver Isaías 42,1), en la pausa después de los primeros milagros (8,17; ver Isaías 53,4), en la transfiguración (17,5; ver Isaías 42,1). Pero en precisamente en este pasaje donde aparece la cita más extensa (12,18-21; ver Isaías 42,1-4). Jesús, quien asume sobre sí mismo las “fatigas” y “sobrecargas” de la gente, quien es “manso y humilde corazón” (11,28-29), es el “Siervo” que reúne todas esas características: (1) “Elegido”, (2) “Amado”, (3) “Complacencia” del Padre, (4) Ungido por el “Espíritu”, (5) Proclamador de la “justicia” de Dios a todas las naciones (ver 12,18). Pero lo que más sorprende es su estilo: la mansedumbre. Jesús realiza su misión con la potencia militar. En estoy hay una gran diferencia con el Mesías que esperaban algunos judíos. Los discípulos entonces van descubriendo cómo Jesús marca la diferencia: (1) No es amigo de peleas (“no disputará”); (2) habla suavemente (“no gritará, ni oirá nadie en las plazas su voz”); (3) hace todo lo posible por no hacer daño a quien está convaleciente (“la caña cascada no la quebrará”); (4) respeta los signos pequeños de vitalidad (“ni apagará la mecha humeante”). La misión de Jesús, a pesar del escándalo de los fariseos, proviene de Dios. Su estilo misionero había sido profetizado por Isaías. No queda ahora sino seguir leyendo el cumplimiento de la Palabra en cada una de sus acciones, guiados por las claves que el profeta nos dio. Cultivemos la semilla de la Palabra en lo profundo del corazón 1. ¿Qué hace Jesús cuando lo amenazan de muerte? 2. ¿De procede la figura del “Siervo Sufriente de Yahveh”? ¿Qué lo caracteriza? 3. ¿Qué nuevo conocimiento del misterio de Jesús nos aporta el pasaje de hoy? ¿Qué implicaciones tiene para todo “cristiano”, es decir, “ungido” en Cristo? "No hay que menester alas para ir a buscar a Dios, sino ponerse en soledad y mirarle dentro de sí" (Santa Teresa de Jesús) P. Fidel Oñoro, cjm Centro Bíblico del CELAM Blog católico de oraciones y reflexiones pastorales sobre la liturgia dominical. Para compartir y difundir el material brindado. Crremos que Dios regala Amor y Liberación gratuita e incondicionalmente. |
Posted: 16 Jul 2010 03:36 PM PDT ¡Ay de los que proyectan iniquidades y traman el mal durante la noche! Al despuntar el día, lo realizan, porque tienen el poder en su mano. Codician campos y los arrebatan, casas, y se apoderan de ellas; oprimen al dueño y a su casa, al propietario y a su herencia. Por eso, así habla el Señor: Yo proyecto contra esta gente una desgracia tal que ustedes no podrán apartar el cuello, ni andar con la cabeza erguida, porque será un tiempo de desgracia. Aquel día, se proferirá contra ustedes una sátira y se entonará esta lamentación: «Hemos sido completamente devastados; ¡lo que le corresponde a mi pueblo se lo entregan a otros! ¿Cómo me lo quitan a mí, y distribuyen nuestros campos entre los que nos llevan cautivos?» Por eso, no tendrás a nadie que arroje la cuerda para medirte un lote, en la asamblea del Señor. Palabra de Dios. SALMO RESPONSORIAL 9, 1-4b. 7-8b. 14 R. ¡No te olvides de tus pobres, Señor! ¿Por qué te quedas lejos, Señor, y te ocultas en los momentos de peligro? El pobre se consume por la soberbia del malvado y queda envuelto en las intrigas tramadas contra él. R. Porque el malvado se jacta de su ambición, el codicioso blasfema y menosprecia al Señor; el impío exclama en el colmo de su arrogancia: «No hay ningún Dios que me pida cuenta». R. Su boca está llena de maldiciones, de engaños y de violencias; detrás de sus palabras hay malicia y opresión; se pone al acecho en los poblados y mata al inocente en lugares ocultos. R. Pero Tú lo estás viendo: Tú consideras los trabajos y el dolor, para tomarlos en tus propias manos. El débil se encomienda a ti; Tú eres el protector del huérfano. R. Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo 12, 14-21 Los fariseos se confabularon para buscar la forma de acabar con Jesús. Al enterarse de esto, Jesús se alejó de allí. Grandes multitudes lo siguieron, y los sanó a todos. Pero Él les ordenó severamente que no lo dieran a conocer, para que se cumpliera lo anunciado por el profeta Isaías: "Éste es mi servidor, a quien elegí, mi muy querido, en quien tengo puesta mi predilección. Derramaré mi Espíritu sobre Él y anunciará la justicia a las naciones. No discutirá ni gritará, y nadie oirá su voz en las plazas. No quebrará la caña doblada y no apagará la mecha humeante, hasta que haga triunfar la justicia; y las naciones, pondrán la esperanza en su Nombre". Palabra del Señor. LITURGIA DE LAS HORAS TIEMPO ORDINARIO SÁBADO DE LA SEMANA XV De la feria - Salterio III. I vísperas del Domingo XVI 17 de julio LAUDES (Oración de la mañana) INVOCACIÓN INICIAL V. Señor, abre mis labios R. Y mi boca proclamará tu alabanza. INVITATORIO Ant. Del Señor es la tierra y cuanto la llena; venid, adorémosle. Salmo 94 INVITACIÓN A LA ALABANZA DIVINA Venid, aclamemos al Señor, demos vítores a la Roca que nos salva; entremos a su presencia dándole gracias, aclamándolo con cantos. Porque el Señor es un Dios grande, soberano de todos los dioses: tiene en su mano las simas de la tierra, son suyas las cumbres de los montes; suyo es el mar, porque él lo hizo, la tierra firme que modelaron sus manos. Venid, postrémonos por tierra, bendiciendo al Señor, creador nuestro. Porque él es nuestro Dios, y nosotros su pueblo, el rebaño que él guía. Ojalá escuchéis hoy su voz: «No endurezcáis el corazón como en Meribá, como el día de Masá en el desierto; cuando vuestros padres me pusieron a prueba y dudaron de mí, aunque habían visto mis obras. Durante cuarenta años aquella generación me repugnó, y dije: Es un pueblo de corazón extraviado, que no reconoce mi camino; por eso he jurado en mi cólera que no entrarán en mi descanso» Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén Himno: CANTEMOS AL SEÑOR CON INDECIBLE GOZO. Cantemos al Señor con indecible gozo, él guarde la esperanza de nuestro corazón, dejemos la inquietud posar entre sus manos, abramos nuestro espíritu a su infinito amor. Dichoso será aquel que siempre en él confía en horas angustiosas de lucha y de aflicción, confiad en el Señor si andáis atribulados, abramos nuestro espíritu a su infinito amor. Los justos saben bien que Dios siempre nos ama, en penas y alegrías su paz fue su bastión, la fuerza del Señor fue gloria en sus batallas, abramos nuestro espíritu a su infinito amor. Envíanos, Señor, tu luz esplendorosa si el alma se acongoja en noche y turbación, qué luz, qué dulce paz en Dios el hombre encuentra; abramos nuestro espíritu a su infinito amor. Recibe, Padre santo, el ruego y la alabanza, que a ti, por Jesucristo y por el Consolador, dirige en comunión tu amada y santa Iglesia; abramos nuestro espíritu a su infinito amor. Amén. SALMODIA Ant. 1. Tú, Señor, estás cerca, y todos tus mandatos son estables. Salmo 118, 145-152 TE INVOCO DE TODO CORAZÓN Te invoco de todo corazón; respóndeme, Señor, y guardaré tus leyes; a ti grito: sálvame, y cumpliré tus decretos; me adelanto a la aurora pidiendo auxilio, esperando tus palabras. Mis ojos se adelantan a las vigilias de la noche, meditando tu promesa; escucha mi voz por tu misericordia, con tus mandamientos dame vida; ya se acercan mis inicuos perseguidores, están lejos de tu voluntad. Tú, Señor, estás cerca, y todos tus mandatos son estables; hace tiempo comprendí que tus preceptos los fundaste para siempre. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén Ant. Tú, Señor, estás cerca, y todos tus mandatos son estables. Ant. 2. Mándame tu sabiduría, Señor, para que me asista en mis trabajos. Cántico: DAME SEÑOR, LA SABIDURÍA Sb 9, 1-6. 9-11 Dios de los padres y Señor de la misericordia, que con tu palabra hiciste todas las cosas, y en tu sabiduría formaste al hombre, para que dominase sobre tus creaturas, y para que rigiese el mundo con santidad y justicia y lo gobernase con rectitud de corazón. Dame la sabiduría asistente de tu trono y no me excluyas del número de tus siervos, porque siervo tuyo soy, hijo de tu sierva, hombre débil y de pocos años, demasiado pequeño para conocer el juicio y las leyes. Pues aunque uno sea perfecto entre los hijos de los hombres, sin la sabiduría, que procede de ti, será estimado en nada. Contigo está la sabiduría conocedora de tus obras, que te asistió cuando hacías el mundo, y que sabe lo que es grato a tus ojos y lo que es recto según tus preceptos. Mándala de tus santos cielos y de tu trono de gloria envíala para que me asista en mis trabajos y venga yo a saber lo que te es grato. Porque ella conoce y entiende todas las cosas, y me guiará prudentemente en mis obras, y me guardará en su esplendor. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén Ant. Mándame tu sabiduría, Señor, para que me asista en mis trabajos. Ant. 3. La fidelidad del Señor dura por siempre. Salmo 116 - INVITACIÓN UNIVERSAL A LA ALABANZA DIVINA. Alabad al Señor, todas las naciones, aclamadlo, todos los pueblos: Firme es su misericordia con nosotros, su fidelidad dura por siempre. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén Ant. La fidelidad del Señor dura por siempre. LECTURA BREVE Flp 2, 14-15 Hacedlo todo sin murmuraciones ni discusiones, a fin de que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha, en medio de esta generación mala y perversa, entre la cual aparecéis como antorchas en el mundo. RESPONSORIO BREVE V. A ti grito, Señor, tú eres mi refugio. R. A ti grito, Señor, tú eres mi refugio. V. Mi heredad en el país de la vida. R. Tú eres mi refugio. V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. R. A ti grito, Señor, tú eres mi refugio. CÁNTICO EVANGÉLICO Ant. Ilumina, Señor, a los que viven en tiniebla y en sombra de muerte. Cántico de Zacarías. EL MESÍAS Y SU PRECURSOR Lc 1, 68-79 Bendito sea el Señor, Dios de Israel, porque ha visitado y redimido a su pueblo. suscitándonos una fuerza de salvación en la casa de David, su siervo, según lo había predicho desde antiguo por boca de sus santos profetas: Es la salvación que nos libra de nuestros enemigos y de la mano de todos los que nos odian; ha realizado así la misericordia que tuvo con nuestros padres, recordando su santa alianza y el juramento que juró a nuestro padre Abraham. Para concedernos que, libres de temor, arrancados de la mano de los enemigos, le sirvamos con santidad y justicia, en su presencia, todos nuestros días. Y a ti, niño, te llamarán Profeta del Altísimo, porque irás delante del Señor a preparar sus caminos, anunciando a su pueblo la salvación, el perdón de sus pecados. Por la entrañable misericordia de nuestro Dios, nos visitará el sol que nace de lo alto, para iluminar a los que viven en tiniebla y en sombra de muerte, para guiar nuestros pasos por el camino de la paz. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén Ant. Ilumina, Señor, a los que viven en tiniebla y en sombra de muerte. PRECES Invoquemos a Dios por intercesión de María, a quien el Señor colocó por encima de todas las creaturas celestiales y terrenas, diciendo: Contempla, Señor, a la Madre de tu Hijo y escúchanos. Padre de misericordia, te damos gracias porque nos has dado a María como madre y ejemplo; santifícanos por su intercesión. Tú que hiciste que María meditara tus palabras, guardándolas en su corazón, y fuera siempre fidelísima hija tuya, por su intercesión haz que también nosotros seamos de verdad hijos tuyos y discípulos de tu Hijo. Tú que quisiste que María concibiera por obra del Espíritu Santo, por intercesión de María otórganos los frutos de este mismo Espíritu. Tú que diste fuerza a María para permanecer junto a la cruz y la llenaste de alegría con la resurrección de tu Hijo, por intercesión de María confórtanos en la tribulación y reanima nuestra esperanza. Se pueden añadir algunas intenciones libres. Concluyamos nuestras súplicas con la oración que el mismo Cristo nos enseñó: Padre nuestro... ORACIÓN Dios misericordioso, fuente y origen de nuestra salvación, haz que, mientras dure nuestra vida aquí en la tierra, te alabemos constantemente y podamos así participar un día en la alabanza eterna del cielo. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén. CONCLUSIÓN V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna. R. Amén. ------------------------------ I VÍSPERAS Oración de la tarde V. Dios mío, ven en mi auxilio R. Señor, date prisa en socorrerme. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. Aleluya. Himno: HOY ROMPE LA CLAUSURA Hoy rompe la clausura del surco empedernido el grano en él hundido por nuestra mano dura; y hoy da su flor primera la rama sin pecado del árbol mutilado por nuestra mano fiera. Hoy triunfa el buen Cordero que, en esta tierra impía, se dio con alegría por el rebaño entero; y hoy junta su extraviada majada y la conduce al sitio en que reluce la luz resucitada. Hoy surge, viva y fuerte, segura y vencedora, la Vida que hasta ahora yacía en honda muerte; y hoy alza del olvido sin fondo y de la nada al alma rescatada y al mundo redimido. Amén. SALMODIA Ant. 1. Desead la paz a Jerusalén. Salmo 121 LA CIUDAD SANTA DE JERUSALÉN ¡Qué alegría cuando me dijeron: «Vamos a la casa del Señor»! Ya están pisando nuestros pies tus umbrales, Jerusalén. Jerusalén está fundada como ciudad bien compacta. Allá suben las tribus, las tribus del Señor, según la costumbre de Israel, a celebrar el nombre del Señor; en ella están los tribunales de justicia en el palacio de David. Desead la paz a Jerusalén: «Vivan seguros los que te aman, haya paz dentro de tus muros, seguridad en tus palacios.» Por mis hermanos y compañeros, voy a decir: «La paz contigo.» Por la casa del Señor, nuestro Dios, te deseo todo bien. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén Ant. Desead la paz a Jerusalén. Ant. 2. Desde la aurora hasta la noche mi alma aguarda al Señor. Salmo 129 - DESDE LO HONDO A TI GRITO, SEÑOR. Desde lo hondo a ti grito, Señor; Señor, escucha mi voz; estén tus oídos atentos a la voz de mi súplica. Si llevas cuenta de los delitos, Señor, ¿quién podrá resistir? Pero de ti procede el perdón, y así infundes respeto. Mi alma espera en el Señor, espera en su palabra; mi alma aguarda al Señor, más que el centinela la aurora. Aguarde Israel al Señor, como el centinela la aurora; porque del Señor viene la misericordia, la redención copiosa; y él redimirá a Israel de todos sus delitos. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén Ant. Desde la aurora hasta la noche mi alma aguarda al Señor. Ant. 3. Al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo y en la tierra. Aleluya. Cántico: CRISTO, SIERVO DE DIOS, EN SU MISTERIO PASCUAL - Flp 2, 6-11 Cristo, a pesar de su condición divina, no hizo alarde de su categoría de Dios, al contrario, se anonadó a sí mismo, y tomó la condición de esclavo, pasando por uno de tantos. Y así, actuando como un hombre cualquiera, se rebajó hasta someterse incluso a la muerte y una muerte de cruz. Por eso Dios lo levantó sobre todo y le concedió el «Nombre-sobre-todo-nombre»; de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra, en el abismo y toda lengua proclame: Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén Ant. Al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo y en la tierra. Aleluya. LECTURA BREVE 2Pe 1, 19-21 Tenemos confirmada la palabra profética, a la que hacéis bien en prestar atención, como a lámpara que brilla en lugar oscuro, hasta que despunte el día y salga el lucero de la mañana en vuestro corazón. Ante todo habéis de saber que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada; pues nunca fue proferida alguna por voluntad humana, sino que, llevados del Espíritu Santo, hablaron los hombres de parte de Dios. RESPONSORIO BREVE V. De la salida del sol hasta su ocaso, alabado sea el nombre del Señor. R. De la salida del sol hasta su ocaso, alabado sea el nombre del Señor. V. Su gloria se eleva sobre los cielos. R. Alabado sea el nombre del Señor. V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. R. De la salida del sol hasta su ocaso, alabado sea el nombre del Señor. CÁNTICO EVANGÉLICO Ant. Entró Jesús en una aldea, y Marta le hospedó en su casa y le servía. Cántico de María. ALEGRÍA DEL ALMA EN EL SEÑOR Lc 1, 46-55 Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador; porque ha mirado la humillación de su esclava. Desde ahora me felicitarán todas las generaciones, porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí: su nombre es santo, y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación. El hace proezas con su brazo: dispersa a los soberbios de corazón, derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes, a los hambrientos los colma de bienes y a los ricos los despide vacíos. Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de su misericordia -como lo había prometido a nuestros padres- en favor de Abraham y su descendencia por siempre. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén Ant. Entró Jesús en una aldea, y Marta le hospedó en su casa y le servía. PRECES Invoquemos a Cristo, alegría de cuantos se refugian en él, y digámosle: Míranos y escúchanos, Señor. Testigo fiel y primogénito de entre los muertos, tú que nos purificaste con tu sangre no permitas que olvidemos nunca tus beneficios. Haz que aquellos a quienes elegiste como ministros de tu Evangelio sean siempre fieles y celosos dispensadores de los misterios del reino. Rey de la paz, concede abundantemente tu Espíritu a los que gobiernan las naciones para que cuiden con interés de los pobres y postergados. Sé ayuda para cuantos son víctimas de cualquier segregación por causa de su raza, color, condición social, lengua o religión y haz que todos reconozcan su dignidad y respeten sus derechos. Se pueden añadir algunas intenciones libres. A los que han muerto en tu amor dales también parte en tu felicidad con María y con todos tus santos. Porque Jesús ha resucitado, todos somos hijos de Dios; por eso nos atrevemos a decir: Padre nuestro... ORACIÓN Mira con misericordia a estos tus hijos, Señor, y multiplica tu gracia sobre nosotros, para que, fervorosos en la fe, la esperanza y el amor, perseveremos en el fiel cumplimiento de tus mandamientos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén. CONCLUSIÓN V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna. R. Amén. ------------------------------ COMPLETAS (Oración antes del descanso nocturno) INVOCACIÓN INICIAL V. Dios mío, ven en mi auxilio R. Señor, date prisa en socorrerme. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. Aleluya. EXAMEN DE CONCIENCIA Hermanos, habiendo llegado al final de esta jornada que Dios nos ha concedido, reconozcamos sinceramente nuestros pecados. Yo confieso ante Dios todopoderoso y ante vosotros, hermanos, que he pecado mucho de pensamiento, palabra, obra y omisión: por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa. Por eso ruego a santa María, siempre Virgen, a los ángeles, a los santos y a vosotros, hermanos, que intercedáis por mí ante Dios, nuestro Señor. V. El Señor todopoderoso tenga misericordia de nosotros, perdone nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna. R. Amén. Himno: CUANDO LA LUZ DEL SOL ES YA PONIENTE Cuando la luz del sol es ya poniente, gracias, Señor, es nuestra melodía; recibe, como ofrenda, amablemente, nuestro dolor, trabajo y alegría. Si poco fue el amor en nuestro empeño de darle vida al día que fenece, convierta en realidad lo que fue un sueño tu gran amor que todo lo engrandece. Tu cruz, Señor, redime nuestra suerte de pecadora en justa, e ilumina la senda de la vida y de la muerte del hombre que en la fe lucha y camina. Jesús, Hijo del Padre, cuando avanza la noche oscura sobre nuestro día, concédenos la paz y la esperanza de esperar cada noche tu gran día. Amén. SALMODIA Ant. 1. Ten piedad de mí, Señor, y escucha mi oración. Salmo 4 - ACCIÓN DE GRACIAS. Escúchame cuando te invoco, Dios, defensor mío; tú que en el aprieto me diste anchura, ten piedad de mí y escucha mi oración. Y vosotros, ¿hasta cuándo ultrajaréis mi honor, amaréis la falsedad y buscaréis el engaño? Sabedlo: el Señor hizo milagros en mi favor, y el Señor me escuchará cuando lo invoque. Temblad y no pequéis, reflexionad en el silencio de vuestro lecho; ofreced sacrificios legítimos y confiad en el Señor. Hay muchos que dicen: «¿Quién nos hará ver la dicha, si la luz de tu rostro ha huido de nosotros?» Pero tú, Señor, has puesto en mi corazón más alegría que si abundara en trigo y en vino. En paz me acuesto y en seguida me duermo, porque tú sólo, Señor, me haces vivir tranquilo. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén Ant. Ten piedad de mí, Señor, y escucha mi oración. Ant. 2. Durante la noche, bendecid al Señor. Salmo 133 - ORACIÓN VESPERTINA EN EL TEMPLO Y ahora bendecid al Señor, los siervos del Señor, los que pasáis la noche en la casa del Señor: Levantad las manos hacia el santuario, y bendecid al Señor. El Señor te bendiga desde Sión: el que hizo cielo y tierra. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén Ant. Durante la noche, bendecid al Señor. LECTURA BREVE Dt 6,4-7 Escucha, Israel: El Señor, nuestro Dios, es solamente uno. Amarás al Señor, tu Dios, con todo el corazón, con toda el alma, con todas las fuerzas. Las palabras que hoy te digo quedarán en tu memoria; se las repetirás a tus hijos y hablarás de ellas estando en casa y yendo de camino, acostado y levantado. RESPONSORIO BREVE V. En tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu. R. En tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu. V. Tú, el Dios leal, nos librarás. R. Te encomiendo mi espíritu. V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. R. En tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu. CÁNTICO EVANGÉLICO Ant. Sálvanos, Señor, despiertos, protégenos mientras dormimos, para que velemos con Cristo y descansemos en paz. CÁNTICO DE SIMEÓN Lc 2, 29-32 Ahora, Señor, según tu promesa, puedes dejar a tu siervo irse en paz, porque mis ojos han visto a tu Salvador, a quien has presentado ante todos los pueblos luz para alumbrar a las naciones y gloria de tu pueblo Israel. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén Ant. Sálvanos, Señor, despiertos, protégenos mientras dormimos, para que velemos con Cristo y descansemos en paz. ORACIÓN OREMOS, Guárdanos, Señor, durante esta noche y haz que mañana, ya al clarear el nuevo día, la celebración del domingo nos llene con la alegría de la resurrección de tu Hijo. Que vive y reina por los siglos de los siglos. Amén BENDICIÓN V. El Señor todopoderoso nos conceda una noche tranquila y una santa muerte. R. Amén. ANTÍFONA FINAL DE LA SANTÍSIMA VIRGEN Madre del Redentor, Virgen fecunda, puerta del cielo siempre abierta, estrella del mar, ven a librar al pueblo que tropieza y se quiere levantar. Ante la admiración de cielo y tierra, engendraste a tu santo Creador, y permaneces siempre virgen. Recibe el saludo del ángel Gabriel, y ten piedad de nosotros, pecadores. Blog católico de oraciones y reflexiones pastorales sobre la liturgia dominical. Para compartir y difundir el material brindado. Crremos que Dios regala Amor y Liberación gratuita e incondicionalmente. |








No hay comentarios:
Publicar un comentario